Los Angelotes han elegido como lugar de cría los fondos arenosos de Las Teresitas. Esto es algo de lo que deberíamos sentirnos orgullosos ya que es una especie en peligro de extinción.
Las madres paren durante todo el año y dejan a sus crías desasistidas bajo el resguardo de las aguas de nuestra playa, que les proporciona el alimento necesario para sobrevivir sus primeros meses de vida.
Los alevines de estos inofensivos escualos que descansan en nuestra playa no son más grande que una mano, y entre todos debemos protegerlos.
Una buena manera de no causarles daño es acceder al mar arrastrando los pies en lugar de hacerlo con pisadas, sobre todo por las mañanas en días de marea baja que es cuando mayor probabilidad de pisarlos tenemos.
Gracias por su colaboración a : Asociación Tonina y Angel Shark Project
+ info en http://asociaciontonina.com/ y
https://angelsharknetwork.com/canaryislands/
